No es un SUV. Es un AMG.
Mercedes-AMG GLC Coupé 43 4MATIC: consumo de combustible en el ciclo mixto: 10,7-10,2 l/100 km, emisiones de CO2 en el ciclo mixto: 244-232 g/km[1] (240-232 g/km)[2]
Mercedes-AMG GLC Coupé 63 4MATIC+: consumo de combustible en el ciclo mixto: 12,9-12,5 l/100 km, emisiones de CO2 en el ciclo mixto: 293-284 g/km[1] (280-275 g/km)[2]
Mercedes-AMG GLC Coupé 63 S 4MATIC+: consumo de combustible en el ciclo mixto: 12,9-12,8 l/100 km, emisiones de CO2 en el ciclo mixto: 293-289 g/km[1] (279 g/km)[2]
[1] Los valores de consumo de energía y autonomía eléctrica se han obtenido a partir del procedimiento de medición prescrito en el Reglamento (UE) 715/2017 en su versión actual vigente. Los valores de emisiones de CO2 indicados han sido obtenidos de acuerdo con el procedimiento de ensayo «WLTP CO2» según lo dispuesto en el art. 2 No. 3 Reglamento de aplicación (UE) 2017/1153. Los valores de consumo de combustible se calcularon sobre la base de esos valores.
[2] Los valores de CO2 indicados han sido obtenidos de acuerdo con el procedimiento de ensayo “NEDC CO2“ según lo dispuesto en el art. 2 No1 Reglamento de aplicación (UE) 2017/1153.
[1] La potencia nominal y el par motor nominal se calculan según el Reglamento (CE) 715/2007 en su versión actual. Potencia expresada en kilovatios (kW), se añade la potencia expresada (CV), por ser un dato de carácter comercial y general, si bien no es una unidad permitida del Sistema Legal de Unidades de Medida basado en el Sistema Internacional de Medidas (SI). Ley 32/2014, de 22 de diciembre, de Metrología.
El diseño exterior del nuevo Mercedes-AMG GLC Coupé revela de forma innegable su estirpe de auténtico AMG. Esto comienza con el diseño específico AMG de la calandra del radiador, en forma de A estilizada, continúa con las tomas de aire en el parachoques delantero y termina en el difusor de la zaga, con los dos embellecedores cromados de la salida de escape doble del sistema de escape AMG.
El diseño del Mercedes-AMG GLC 63 4MATIC+ incluye la nueva calandra del radiador específica de AMG en forma de A. Este elemento presenta en este vehículo un aspecto más voluminoso e impresionante que en los modelos 43. Al igual que el motor AMG V8 biturbo de 4,0 litros con 350 kW (476 CV)[1] y 650 Nm, con el que pueden lograrse prestaciones absolutamente aptas para la competición. Gracias a su tren de rodaje deportivo AMG ajustable, el vehículo resulta también adecuado para la conducción a diario.
El motor AMG V8 biturbo de 4,0 litros del Mercedes-AMG GLC 63 S 4MATIC+ es el propulsor más potente de su categoría, con una potencia impresionante de 375 kW (510 CV)[1] y un par máximo de 700 Nm. Se trata de cotas fuera de lo común, que precisan para su dominio el sistema de frenos de alto rendimiento AMG con discos compuestos.